Se acomoda como puede,
deja los palitos con los
que se sostiene
y le caen las lágrimas
de rabia por no poder hacer,
por no ser como antes.
Caminadora inalcanzable
de la tierra de colores
con sus cabritas a montones
cruza el camino
(que ya no es el de antes)
esquivando camiones.
junta la tristeza
con las orejas
su piel curtida
no sabe de cremas
su verdad le saca risas
todavía camino, dice,
todavía miro, dice.
Los nuevos pobladores
se olvidan de los
compañeros de la pacha
le sacan agua para sus hoteles
dejan sin vida sus cultivos
mientras los animalitos
trepan cada vez más arriba
por un poco de comida.
Al lado de su fuego,
y el mate compañero
ve pasar el tiempo
y revuelve el pasado
en la olla del presente,
nos convida de a poco,
nos muestra su gente.
Un pajarito le contó
que a su puerta
llegaron dos
que hoy se van
por el rumbo del cardón.
No hay comentarios:
Publicar un comentario